So, shall I?

Hace mucho que no escribo.

Bueno… que no escribo públicamente. O inclusive, que no escribo en el sentido estricto de la palabra, pues tengo mucho que, como siempre, he imaginado, soñado, pensado y escrito en algún lugar de mi mente. Sin pensar precísamente si debería o no publicarlo (y por publicar me refiero a escribirlo diréctamente y tal vez enviarlo o no a su destinatario o destinatarios)… pero bueno… hace mucho que no escribo públicamente. O ahora, con el iPhone, que también escribo ahí, bajo llave y sin ser público, todas las cosas que pienso que debería, podría y no debería y no podría decir.

It’s been a long and interesting month.

Conocer… conocer es tal vez la palabra adecuada para el sentimiento de este mes. Bueno… para uno de los sentimientos de este mes. Y por “este mes” me refiero a marzo y abril, porque de repente olvido que ya estamos bien entrados en abril.

Y de nuevo, no sé si escribir o no.

A quién, para empezar, podría interesarle todas estas cosas que podría decir? Y me interesaría que alguien fuera de mi cabeza (y de mi control, ya que no hay mucho control una vez que uno decide poner sus pensamientos en internet) se entere de mis pensamientos?

Y me pasa la idea por la cabeza de iniciar un blog anónimo, en donde pueda confesar lo que en vivo no puedo (o no debo, o no sé!), y platicar y decir y pensar. Y, entonces… para qué escribiría uno si nada más hace lo que hace uno normalmente al pensar?

Y me acuerdo de Rafa y de Ernesto. Qué ironía, si es que esa es la palabra adecuada, que platicaba con Rafa sobre las ganas que tenía de escribirle a Ernesto, hace varios meses, y que ahora me digo a mi mismo que quisiera escribirle a Rafa… Como es que las muertes, tanto físicas como más existenciales/psicológicas siempre nos hacen ver y apreciar muchas cosas. Y cómo me gustaría contarle a Rafa lo pequeño que es este mundo, y oirlo reír y decirme alguna sandez, a la que seguramente no me quedaría callado y respondería. Y cómo quisiera poder escuchar los consejos de aquellos dos, y las burlas de Carlos.

Conocer!

Conocerme a fondo. Conocer cómo me chocan tantas y tantas cosas de mi manera de ser. Conocer cómo me hacen falta y me hacen daño, al mismo tiempo, todas esas cosas. Conocer que es, posiblemente, un rasgo de los Gómez ser como soy, aunque nunca se me hubiera ocurrido pensar que así fuera. Conocer que así como checo compulsivamente, y sin reparos, el estado de X ó Y paquete en el sitio de UPS, hago lo mismo en situaciones personales, y con los mismos resultados. O sea, ninguno: no por checarlo 20 veces al día las cosas sucederán más rápido.

Conocer que sueño demasiado. Y que eso me fatiga y me deshace internamente. Pero aún así, sigo haciéndolo. Porque me gusta hacerlo. Porque me hace vivir, aunque sea por momentos, en lugares, momentos y situaciones que tal vez nunca podría, debería o quisiera estar. Qué raro no? Soñar con situaciones en las que uno nunca quisiera estar. Y no porque sean pesadillas o similares… simplemente porque tal vez, en el fondo, uno no quiere eso que sueña? Qué tantos niveles de consciencia y deseos, gustos y sueños, existen? Y cuántos de esos están peleados entre si?

Y recuerdo las teorías de los universos infinitos, en donde todas las posibles situaciones y combinaciones suceden. Y pienso que tal vez eso es soñar? Un vistazo a esos universos alternativos? Y pienso, o recuerdo más bien, que me encanta la física, la matemática, la filosofía y todo esto de hacerse preguntas que nunca llegarán a ser respondidas. Y pienso que tal vez es lo que me hace falta… enfocarme en los otros aspectos de mi mente y mi ser que me satisfacen, que me completan, que me hacen seguir adelante, aunque no sepa bien hacia donde?

Conocer-te.

Y pensar que me cuesta trabajo mantener mi filosofía de que uno puede ser feliz per-se. Sin necesidad de estímulos externos. Sin necesidad de nada. Y no porque no lo crea. Lo creo y lo siento. Pero, let’s be honest here… la felicidad por estímulos externos es mejor! Pero quiero recordar y sentirme como me sentía hace 2 meses, con el viento en la espalda y el sol en la cara, escuchando, posiblemente, Pink Floyd y paseando a Xeón. Y no porque no lo sienta. Hace rato caminé cerca de una hora (me chuté todo el disco de “A momentary lapse of reason”), y no es que me sienta mal. Pero… ciertamente es un sentimiento diferente. Y no es que sea mejor o peor. Pero tal vez he soñado demasiado, demasiado pronto, demasiado alto. Y tal vez, seguro, he exagerado, como casi siempre?

But it’s ok. También he conocido, descubierto o redescubierto que puedo sentirme así otra vez. Que tal vez inclusive lo deseo. Que lo deseo es la idea correcta, no engaño a nadie, ni a mi ni a mis 3 lectores.

It’s just that I need to keep calm.

So, shall I?

Small steps Sparks!

Y cómo es que uno abre y cierra capítulos de su vida. Y cómo es que mi mente lo hace igual, todos los días. En capítulos de libros que tal vez nunca escribiré. En títulos y comienzos de historias fantásticas y terrenales. Porque siempre se me ha dado bien eso de imaginarme comienzos de historias. Frases, ideas, personajes tal vez? Pero creo que mi imaginación, a pesar de ser muy prolífica, no da como para hilar una historia completa, de principio a fin, que no esté basada en la propia historia de mi vida. Y como esa todavía no termina, siempre me quedo así, en el principio.

Y como, por error tal vez, o porque así lo interpretó mi mente, confundía la frase de “you love my dark” con “you love my dog” de Everything, de Alanis Morissette. Y qué risa! La escucho de nuevo y ya no puedo escuchar “dog”, ahora que leí letra, aunque me gusta más con “dog”.

So, shall I?

But the problem is that I only know one way to be myself. To act like myself. To feel like myself.

Y estoy cansado. Cansado de tantas y tantas cosas. Cansado del trabajo, cansado de mi manera de ser, cansado de tener dos polos dentro de mi, jalando tal vez a dos lugares diferentes? Cansado de ver hacia adelante y no saber qué viene. Cansado de refugiarme en mi mismo. Cansado de estar cansado. Cansado de no saber si esos dos polos existen, siquiera, y si existen, no saber a dónde jalan. Cansado de reírme de mi mismo, porque todo esto es muy gracioso! Bueno, tal vez no estoy tan cansado de reírme de mi mismo. [Uhm, 10 minutos buscando si reírme lleva o no acento. Mis clases de ortografía están muy lejanas, y, siendo honestos, nunca puse mucha atención en eso]

So, shall I?

Y no sé nisiquiera qué debería o no.

Leave a Reply